Trujillo Sour

Vacaciones. Quien diría que las vacaciones han acabado y que ahora me rehúso a ir a mi tercer día de clases, cuando antes moría por ver a mis amigas y hablar con ellas de las “buenas nuevas” en Trujillo. Eso era antes, antes de ver tu cara de baboso (porque no existe otra palabra) en el único salón, en el único curso que sé que voy a odiar.

No tengo ganas de escribir. A veces la inspiración surge y la dejo pasar porque esas ideas, de las cuales quiero escribir, no son buenas. No es lo correcto redundar en “ese” tema que me ha traído tantos problemas el año pasado (y para ser más clara, el ciclo pasado). Creo que las personas deberían saber que cuando publico algún post, comentario u escribo algo es porque realmente el corazón me lo pide… ¡Y VAYA QUE LO HACE! Desde que tengo uso de razón he creído que todo se arregla con arrepentimiento, una canción y una carta. Hay seres humanos que piden más que eso. Juran que alguien se debe arrodillar ante ellos para comprender que realmente lo sienten. Que tengas la mirada del gato de Shrek no te ayudará mi amor, se lo que tratas de hacer… pero no te has dado cuenta que ¿quizás es muy tarde? Ojala que alguien compre lo que quieres vender, yo ya no. Arreglemos las cosas pero… pero ambas sabemos que nada va a cambiar… “y es que no eres tú, soy yo”. Soy YO la que ya no cree en ti, ni en todas tus frases de “me hace daño, yo he sido la que sufrió…”. Cariño, yo he sufrido. Yo me he lamentado mil veces por esto y si tú dices que sufres, déjame decirte entonces que yo ya estaría muerta y… ¡SORPRESA! NO LO ESTOY.

“Soy única en mi especie”

Desde ayer me puse a pensar que realmente soy única. No en ese discurso de que: “todos somos hijos de dios, pero las personas tienen algo diferente…” (Todo lo barato que nos dicen en la confirmación), sino que, no sé si ustedes pero yo hago las cosas pensando en que si algún día me encuentro en la misma situación quisiera que actuaran de esa manera conmigo. Creo que esa es la razón del porque las personas me decepcionan tanto. No quiero que sientan lo mismo que yo, sino que actúen como se hacen llamar: “personas”. Una “persona” no engaña a la otra, no le sigue el juego, no le vende basura envuelta en colores que llaman tu atención. Una “persona” habla de sus sentimientos y te los aclara ni bien te ve. Una “persona” no se rinde cuando siente que todo está perdido, sino que busca otra forma de hacerte entender que las cosas no tienen que terminar así, sino mejor. Pero a veces los finales toman otro rumbo, y ahí si es aceptable que dejes de seguirlo en el Twitter, que lo elimines del Messenger y del Facebook, y que le escribas una carta diciéndole que: “…Pero no importa, no interesa, tu sigue con tu vida como siempre lo has hecho y no digas que “te importa” porque… por dios no seas tan cara dura, no te interesa ni mierda lo que me pase en realidad, porque si lo hiciera no me hubieses tratado así nunca… en fin, cuídate, te deseo lo mejor siempre y haz lo que te parezca con esta carta…”. Diciéndole eso. Ya no vale intentar quedarte cerca de alguien porque simplemente te da asco toda su existencia… porque simplemente no quieres aceptar que la que pudo haber tenido toda la culpa eres tú en realidad y no el… no sé porque me afecta tanto si han pasado casi 4 meses y en ese tiempo he recibido mucho… tanto que no es justo que continúe con un show que ayer acabo pero quise volver a intentar. ¿Intentar qué? Siento que ni yo me conozco. Ya sé lo que dirá Andrea: “si eres tan buena para algunas cosas ¿Por qué no puedes ser para esto?”. Sabes ¿por qué? porque simplemente no se me da la gana de hacerlo, y porque en todo este tiempo he sabido que estaba haciendo mal pero quería seguir engañándome y poner lo único que me quedaba de felicidad en esto. ¿No te has percatado que he perdido mucho? Ya bueno cuando lo hagas no quiero que me digas nada mas ¿sí? porque si he entrado sola en esto yo misma he de salir.

(…) Pude recuperar algo de Trujillo antes de irme, y esos no son mis libros de Harry Potter, sino la canción que ahora les público. Parachute se convirtió, en todas esta vacaciones, en la banda que más he querido desde Nsync y O-town. Por ellos estudiaba alemán, y aprendía frases raras en portugués. Por Will Anderson tuve en mente un matrimonio fuera de este lugar, contando que Nate, Kit, Johnny y Alex sean mis invitados especiales. Soñar no cuesta nada, pero cuando te enfrentas a la realidad, es mejor seguir manteniendo los ojos cerrados y no pensar en el futuro.



“Crazy? Everybody thinks I’m crazy, everybody thinks I can’t slow down… slow down? So love me when it makes no sense at all, even when I gone keep me hanging on”